Nuestras hojas de encina proceden del Quercus ilex, comúnmente conocido como encina o acebo. Originarias de la región mediterránea, estas hojas se caracterizan por su naturaleza dura y siempre verde y sus distintivos bordes lobulados. Con una longitud aproximada de 3 a 7 cm, las hojas de encina aportan un toque de encanto mediterráneo a cualquier hábitat.

Las hojas de encina brindan excelentes escondites y oportunidades de búsqueda de alimento para peces, camarones y otros habitantes acuáticos y terrestres. A medida que se descomponen, liberan en el agua compuestos beneficiosos, antibacterianos y antifúngicos, que mejoran la calidad del agua y replican las condiciones naturales de los entornos nativos de muchas especies. La estructura robusta de estas hojas garantiza que duren más, creando microhábitats duraderos y promoviendo un ecosistema dinámico.

Estos ingredientes botánicos liberan gradualmente taninos, que pueden reducir el pH del agua y agregar un tinte sutil y natural. Este proceso ayuda a replicar las condiciones suaves y ácidas que se encuentran en muchos hábitats naturales, beneficiando a las especies que prosperan en dichos entornos.

Ya sea que esté buscando crear una nueva configuración o mejorar una existente, las hojas de encina del árbol Quercus ilex brindan una combinación perfecta de belleza y funcionalidad, fomentando un ecosistema dinámico y próspero.